La lucha vecinal planea realizar una demostración de fuerza el próximo 7 de junio. Las asociaciones de vecinos y movimientos cívicos de Madrid han convocado para el 7-J una jornada de protestas que tendrán lugar de forma conjunta en diferentes puntos de la región. Concretamente, las manifestaciones se desarrollarán de forma simultánea en 18 distritos de la capital y cuatro municipios de la comunidad (Alcalá, Coslada, Leganés y Majadahonda) a lo largo de todo el día. En los barrios que prevén levantarse residen actualmente 3,47 millones de personas. Piden la reapertura de vestíbulos de metro, nuevos centros de salud y que se mantengan sus institutos.
En los últimos meses los barrios madrileños han intensificado su lucha contra los recortes, con un centenar de reivindicaciones activas por toda la comunidad, como contó 20minutos en abril. Entre estas protestas están la petición de la apertura de vestíbulos de metro, el rechazo al cierre de institutos, la reivindicación de nuevos centros de salud en barrios deficitarios o la conservación de parques urbanos. Hasta ahora, los vecinos de cada uno de los barrios se habían manifestado por su cuenta, pero ahora han decidido hacer coincidir todas sus protestas en un mismo día y prácticamente a la misma hora.
Entre los convocantes están la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos (Fravm), la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), la Mesa en Defensa de la Sanidad Pública, la Plataforma contra la Privatización del Canal y CC OO. Bajo el lema de ‘Barrios en lucha por nuestro futuro’, la acción múltiple del 7-J exigirá al Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid que solucionen los problemas más cercanos de los residentes madrileños: en su manifiesto exigen «construir equipamientos necesarios en los barrios», «acondicionar los que están deteriorados», «mejorar el transporte público aumentando la frecuencia de paso», «garantizar el mantenimiento de calles, parques y jardines» y «adjudicar las miles de viviendas vacías de la EMVS y el Ivima». También pedirán que las administraciones antepongan la calidad de los servicios públicos al pago de la deuda.
En Carabanchel los residentes se citarán en el centro de salud de Carabanchel Alto (Avda de la Peseta) y en la plaza Puerta Bonita para pedir la construcción de nuevos equipamientos sanitarios, el uso público de la finca Vista Alegre y centros culturales por todo el distrito. «Los servicios del distrito no dan abasto para cubrir las crecientes necesidades de una vecindad azotada por el paro y el abandono», lamentan los vecinos.
Fuente: 20minutos.es